No sólo una de las mejores pizzerías cerca de la costa, sino que aquí la pizza tiene valor añadido!
En nuestro último número ya les habíamos contado lo mucho que nos gustó la Pizzería La Locanda, frente a la iglesia de San Miguel, en la calle principal en Tazacorte. Les hablamos de la apasionada cocina, el trabajo competente con los alimentos y la calidad de la pizza y pasta que resulta de ello. A parte de los ricos entrantes, primeros y segundos platos y los postres, en este contexto nos parece muy interesante la pizza negra. Lo admitimos: las pintas requieren que nos acostumbremos primero, pero la pizza se las trae. La masa está enriquecida con carbón vegetal activado, que no tiene sabor propio y es uno de los remedios para la salud más antiguos que se conocen; así se equilibra el tracto intestinal, se digiere mejor y encima elimina toxinas. Como les decimos: ¡¡no cambia el sabor para nada!! Si piden una de las fantásticas pizzas con la masa negra, están matando dos pájaros de un tiro: disfrute absoluto y a la vez una recompensa para el cuerpo. Es decir: comer sin arrepentirse. Y hoy en día, ¿donde más se encuentra eso?
Texto y fotos: Uwe S. Meschede
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